La política del Cero Rechazo será la bandera de las
unidades hospitalarias resolutivas.
Desarrollo humano, interculturalidad y actitud de
servicio, son algunas líneas de acción.
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La
Secretaría de Salud del estado y la delegación del Instituto Mexicano del
Seguro Social (IMSS) en Chiapas elaboraron el Programa Estratégico para la
Reducción de la Mortalidad Materna, que se plantea como el mecanismo que
arrojará resultados contundentes a corto, mediano y largo plazo, en el
mejoramiento de la atención de las mujeres con embarazo de alto riesgo.
Tras dos días de análisis y propuestas,
personal y directivos de ambas instituciones de salud, distribuidos en siete
mesas de trabajo, lograron la elaboración de un plan de acción que se basa en
la prevención y la promoción de la salud como ejes rectores para contener la
muerte materna, que en 2014 registró un aumento de 11 por ciento.
El encargado de la Secretaría de Salud a nivel
estatal, Francisco Javier Paniagua Morgan, celebró la realización de esta
estrategia conjunta con el IMSS debido a que en la atención de la emergencia
obstétrica no puede haber fracturas, sino más bien continuidad en la prestación
de servicios sin importar la derechohabiencia de la paciente embarazada, con
base en la política de Cero Rechazo.
“Esta es una línea de acción que vamos a
manejar por Chiapas, no por el IMSS o por la Secretaría de Salud, por Chiapas”,
aseguró el funcionario, quien dijo que este programa estratégico tiene que ser
un ejercicio real en función de indicadores y metas.
Por su parte, Aarón Yamil Melgar Bravo,
delegado del IMSS en Chiapas, resaltó que la suma de esfuerzos se tiene que ver
reflejada en la reducción de la mortalidad materna. “Este es el inicio de una
gran alianza cuya prioridad es el bien común”, aseveró.
Los acuerdos y compromisos establecidos por las
dos instituciones de salud para mejorar la salud materna son: actualizar el
censo de embarazadas de alto riesgo; asegurar la conformación, funcionalidad y
seguimiento de los comités de morbi-mortalidad materna; mantener de forma
permanente la supervisión de expedientes de control prenatal; realizar cirugías
extramuros con énfasis en vasectomías y oclusión tubaria bilateral (OTB) o
salpingoclasia.
Asimismo, analizar el avance en planificación
familiar con base en el censo de mujeres en edad fértil; atención al 100 por
ciento de las pacientes que soliciten los servicios (política Cero Rechazo);
capacitar al personal de urgencias, tococirugía y hospitalización en protocolos
para el manejo de la paciente obstétrica en estado crítico; disminuir el índice
de la primer cesárea en pacientes con primer embarazo; homogeneizar los
criterios para el traslado de pacientes obstétricas; realizar censo de mujeres
en edad fértil.
Además de formar a capacitadores en
interculturalidad, derechos humanos y derechos a la salud; homologar el proceso
de referencia y contrarreferencia; actualizar el diagnóstico de salud materna y perinatal; identificar la
morbilidad materna grave para brindar atención; implementar el programa de
entornos y comunidades saludables como coadyuvante; reactivación inmediata de
los comités municipales de salud; promover el uso de albergues comunitarios
para la atención de las mujeres embarazadas; entre otras líneas de acción.
Este Programa Estratégico para la Reducción de
la Mortalidad Materna se presentará de manera formal en próximas fechas ante
las demás instituciones del sector.
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