El robo de tapas de los registros de drenaje se ha vuelto un negocio redondo que pone en peligro a los ciudadanos.
Cada vez son más las quejas de
coladeras destapadas, esto debido al robo de tapas del registro que día a
día se vuelve más común en la capital. Esto genera un peligro inminente
en los días de lluvias, pues los encharcamientos evitan que los
peatones puedan visualizar los agujeros.
La cantidad de baches y coladeras
abiertas ponen en riesgo a muchas personas. Al respecto, residentes de
la zona Norte Poniente señalaron que la culpa no es únicamente de los
delincuentes que desaparecen las tapas, si no de las personas que tiran
basura en las calles y provocan que algunas zonas se encuentren todo el
tiempo con problemas de encharcamiento por los tapones.
“En muchas partes de la ciudad el
drenaje está abierto. Los que deberían hacer es prohibir la compra venta
de estas para que se acabe el problema. Las autoridades deberían atacar
el problema de raíz, el camión de la basura pasar a la hora indicada,
las personas sacar la basura al toque de campana y que peatones y
automovilistas dejen de arrojar basura en las calles”, opinó Mireya
Bravo.
Quienes se arriesgan a caminar entre las
aguas negras, cruzando calles o avenidas para llegar a su destino,
también corren el riesgo de caer en una coladera abierta.
“A parte de la infección o de los hongos
que pueden contraer, pueden lastimarse si se les va el pie por el
drenaje, o irse cuidando de que algún conductor inconsciente no los
‘bañe’ de agua puerca; por eso es necesaria la pronta intervención de
las autoridades”, dijo Osvaldo Zaballa.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario